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Este fic es completamente propiedad de Mari del blog http://sangreyhielo.com.es
Los personajes son propiedad de la espectacular Meyer.
Tengo permiso de la autora para publicar su historia en mi humilde rincón que es este blog.
Dicho todo esto, espero que la disfruten!^^
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CAPÍTULO 8: El primer día en mi nueva casa
En cuanto sentí a Edward junto a mi caí en un profundo
sueño.
Por la mañana me despertó Alice.
-Buenos días dormilona, es hora de levantarse.- me decía
Alice.
-Um…ya voy, tranquila.- le dije mientras que me levantaba.
-¿Cómo has dormido?.- me pregunto acercándome la ropa.
-Muy bien.- le conteste tomando la ropa que me daba y
poniéndomela.
-Alice esto no es mío.- le dije una vez que me vestí.
-Bueno creo que necesitas ir de compras.- me dijo.- pero
antes a desayunar y yo iré arreglando algunas cosas ¿vale?.
-Vale, pero desde cuando estas aquí.- le pregunte bajando a
la cocina.
-Desde que se fue Edward.- me dijo tranquilamente.- anda
vamos, te he preparado el desayuno y mientras hablamos.
-Bueno, pero de que quieres que hablemos.- le dije untando
mantequilla en una tostada.
-Me gustaría saber si…..¿Jacob te hacia sentir mujer?- me
pregunto mirando hacia la ventana.
-¿Quieres la verdad?- le pregunte mirando hacia la ventana.
-Si, por supuesto.- me dijo
-Pues no, él era como si solo buscara su satisfacción.- le
dije con una sonrisa amarga.- Él no era cuidadoso como……
-Como Edward.- me ayudo a terminar la frase.
-Pues no, además solo piensa en el sexo y no en el amor
creo.- le dije levantándome de la mesa.
-Pues vaya. Pero bueno no sigamos hablando, anda ponte unos
tacones y coge tu bolso que nos vamos de compras.- me dijo saliendo de la
cocina conmigo.
-Alice yo tengo ropa.- le dije.
-Si tienes ropa pero vamos a comprar algunas cosas para ti
pero que le gustan a Edward.- me dijo a la vez que salíamos de la casa y nos
montábamos en su coche.
-¿Cómo que?- le pregunte
-Ahora lo veras. Ya hemos llegado.- me contesto
-Vale, ahora lo veremos.- le dije mientras nos bajamos del
coche y entrábamos al centro comercial.
-Ven, vamos.- me dijo casi arrastrándome a una tienda de
lencería.
-A no Alice, hay no vamos a entrar.- le dije intentando
pararme.
-Si vamos a entrar, necesitas, algunos culots, tangas y
sostenes con encajes, transparencias de colores….Además también te vamos a
comprar algunos pijamas atrevidos y picardías y sin rechistar. ¿Usas pantis o
medias de liga?.- dijo mientras iba cogiendo y echando en una cesta todo lo que
quería.
-Pantis, ¿por que?.- le dije mirando algunos conjuntos de
los que había cogido.
-Porque a partir de ahora usaras de liga.- me dijo
enseñándome algunas.
Antes de que me diera cuenta íbamos cargadas de bolsas y
estábamos viendo trajes, camisas, vestidos e incluso zapatos y yo me lo iba
probando aunque todo no era de mi agrado.
Pero antes de darme cuenta, también habíamos comido,
comprado maquillaje y perfume y estábamos en la casa guardando la ropa y todo
lo demás.
-Estos es otra cosa.- me dijo.- Ves ahora si tienes un
armario en condiciones.
-Vale, pero necesito descansar, estoy rendida de tanto
andar.- le dije eran cerca de las diez, el tiempo había pasado volando.
-Vale, cámbiate y acuéstate a descansar, es tarde.- me dijo.
-Bien, voy a cambiarme. Buenas noches, Alice.- le dije
cambiándome y acostándome sin bajar a despedirla.
-Buenas noches Bella.- me dijo y sentí como alguien se
tumbaba junto a mi.
Pero estaba tan cansada que me acurruque en el frío cuerpo
que había a mi lado y caí en un profundo y tranquilo sueño.
EDWARD POV
En cuanto Bella se acostó me tumbe junto a ella a la vez que
Alice le daba las buenas noches.
Las estaba esperando
hacia bastante tiempo, eran cerca de las ocho cuando llegaron y mientras
arreglaron todo se hicieron cerca de las diez. Bella se veía cansada.
Pero en vez de extrañarse al notar mi frío cuerpo junto al
suyo lo que hizo fue acurrucarse en mí como hacia cuando dormíamos juntos en su
casa en Forks o en nuestra casa cerca de la universidad. No le molestaba mi
frío y duro cuerpo.
Estuve con ella hasta las ocho de la mañana que llego mi
hermana Alice a levantarla.
-Bella, buenos días.-me dijo Alice mientras abría la ventana
para que entrara la luz.- arriba que son las nueve y hoy todavía hay mucho que
hacer.
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Graciias por dejar tus palabras, estas hacen que quiera seguir escribiendo, y que cada día le ponga más ganas!!